“RECONOCIENDO EL QUERER DE DIOS” |
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“Maestro, ¿Dónde vives?…Vengan y verán” Una vez más como es nuestro compromiso, hemos realizado nuestra Jornada Vocacional programada para el mes de junio, en la parroquia San Pedro Nolasco, de San José la Comunidad, donde fueron convocados los jóvenes y señoritas dispuestos/as a compartir reflexiones que iluminen el sentido de la vida y sus búsquedas personales, reconociendo el querer de Dios en su propia historia y caminar. La Jornada Vocacional fue iluminada con el mensaje bíblico de Juan 1,38-39: “Maestro, ¿Dónde vives?…Vengan y verán”, ahondando en las preguntas que a cada persona le van asaltando en el camino, especialmente en su etapa de juventud. Muy conscientes de la necesidad de brindar espacios que orienten e iluminen el sentido de vivir de cada joven, descubriendo el llamado que Dios nos va haciendo a cada persona, dando pistas para ir construyendo sus sueños desde el querer de Dios, desde la libertad personal, sobre todo conscientes que todas y todos hemos sido llamadas/os para vivir plenamente, tal como lo anuncia Jesús. Se inició con el tema de “Vocación a la Vida”, seguidamente, se presentó un espacio de experiencias y testimonios de personas que desde su opción de vida muy particular van viviendo entregadamente su vida al servicio de la familia, su comunidad y a la iglesia misma. En está ocasión, Ana Noemi, MMB, compartió su experiencia y caminar como Mercedaria, desde el inicio de sus búsquedas, preguntas e inquietudes, hasta hoy día. En seguida Sara Rodas compartió muy libremente su caminar y compromiso como Laica comprometida, luego tuvimos la oportunidad de iluminar con la experiencia de la vida matrimonial, con la participación de Felisa y Hermelindo, dos personas con un compromiso y fe arraigada en Dios que va acompañando su vida y su caminar, abrazando sus momentos de dificultad y regalo, como lo expresaron ambos. En cuanto a la experiencia de vida misionera masculina fue compartida por Domingo Francisco Caño, Misionero Oblato.
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La jornada fue muy enriquecedora para todas y todos los participantes, puesto que se recogió la experiencia con una serie de preguntas lanzadas por las y los jóvenes que participaron durante la jornada. Como siempre agradecemos y honramos el trabajo y disponibilidad de las y los coordinadores de las Comunidades Eclesiales de Base, quienes generosamente nos apoyan en estas jornadas. Agradecemos a nuestro buen Dios que nos ha permitido una vez más compartir y promover la vida toda como vocación y que, a través de la persona de Jesús, estamos todos y todas llamadas a vivirnos según el sueño de Dios, nos lleva a constatar y afirmar la elección tierna, libre y amorosa que Dios ha hecho en cada persona desde el vientre de nuestra madre. Agradecemos a la juventud que supo responder en la actividad y fueron quienes dinamizaron el compartir con su participación. A nosotras las hermanas Mercedarias de la comunidad de Cotió en Guatemala, hemos podido trabajar en equipo uniendo los esfuerzos y energías para hacer posible esta actividad esperada y planificada con gusto y esperanza. Concluimos agradeciendo la novedad de Dios que se presenta en lo sencillo, en lo suave de la vida misma, quien apuesta por la felicidad y realización de sus hijas e hijos sin ninguna distinción. Ileana Vásquez Chacaj |
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CRECER EN EL SERVICIO Y LA ENTREGA MUTUA
“CRECER EN EL SERVICIO Y LA ENTREGA MUTUA” |
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Soy Ana Noemi y quiero compartir que he tenido la gran oportunidad de hacer por un mes un voluntariado, en el Hospital Materno Infantil Juan Pablo II, que se encuentra en la colonia El Rosario, Mixco en Guatemala. Desde el momento en que me acerque al hospital para solicitar un servicio voluntario, no dudaron en recibirme, y a partir de ese momento, forme parte del equipo de trabajadoras y trabajadores del hospital. Desde el inicio me brindaron la confianza y la oportunidad de poder aprender, capacitándome en la labor y que el servicio y la entrega fuera mutua. Me sentí con total disponibilidad a realizar cualquier trabajo que me propusieran, le decía a Dios que fuera el trabajo que fuera, lo deseaba hacer con calidad, con entrega, ofreciendo lo mejor de mí. Este voluntariado lo hice en el “Departamento de Archivo” donde se necesita de la rapidez, la habilidad y la memoria, porque es donde se registran los expedientes de cada paciente. Todo el día muchos de los expedientes entran y salen del departamento ya que mucha de nuestra gente busca y necesita ser atendida para sanarse. Así que es un trabajo de hormiga que no para. Me sentí muy a gusto, contenta, sobretodo porque hubo grandes mujeres que me acompañaron, me enseñaron con paciencia y esmero cada detalle para poder realizar con responsabilidad y atención el trabajo que me asignaron… especialmente agradecida con Herminia y Valeria. También agradezco la confianza y la credibilidad que pusieron en mí y así, poder acompañarles por un mes en esta tarea que realizan día a día.
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Algo que me gustó y me motivo mucho, lo cual es de agradecer y celebrar, es que en el hospital, todo trabajo y cada persona de cada departamento tiene su valor y su grano de arena para que cada paciente salga del hospital fortalecida físicamente y espiritualmente. Todo departamento ya sea Recursos Humanos, Administración, Archivo, Cafetería y otros, aunque no tenga contacto con la/el paciente son parte de su proceso de rehabilitación y así lo hace sentir este organización. Por otro lado, el contacto con el hospital me ayudó a percibir cuánta necesidad tiene nuestra gente y que la salud es sumamente importante en nuestra vida y, cuando falta, no solo sufre el/la paciente, sino que sufre toda su familia con ella. Me encontraba con familias dolidas, angustiadas, tristes porque sus hijas e hijos se encontraban hospitalizados. Fue muy significativa esta experiencia para mí, porque el dolor se sentaba a mi lado con la necesidad de saber ser acompañado y escuchado. Por medio de ello, conocí a muchas personas junto con sus realidades y en ellas Dios se me hacía tan presente de manera vulnerable, pero también, lleno de energía porque se hacía presente en cada mujer y hombre que con su profesión respondían a esta necesitad tan vital en nuestra vida. Gracias al Hospital Materno Infantil por abrirme las puertas y vivir el valor de la entrega sin reserva, de la lucha cotidiana y la sensibilidad por las personas más necesitadas. Ana Noemi Chocón Ajcú, MMB |
RENACER EN MÍ
“RENACER EN MÍ” |
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Quiero dar gracias al Señor por mi vocación misionera… “Quisiera clarificar y estampar en todos los pueblos, en todas las razas y hasta en los confines del mundo la imagen de Cristo Redentor oscurecida en la cruz” (M. Margarita), a la Comisión Central, por haberme regalado este tiempo para el año sabático, al Área de África de haberlo permitido y al Área de México-Centroamérica por recibirme. Llegué en octubre de 2015 a Guatemala y he estado en la Misión de Colomba, en Quetzaltenando donde he participado en las actividades apostólicas con las hermanas; desde esta pequeña experiencia de compartir la Vida-Misión con las hermanas, he visto, he vivido el amor y entrega de ellas al pueblo colombino. Hermanas, (Nila, Mica, Lilian y Nora) muchas gracias por su testimonio de vida, de cercanía y de amor al pueblo, vida entregada. La vida de este pueblo es una lucha en todos los sentidos, pero lo que me ha impactado es que desde su pobreza y sencillez, es un pueblo muy acogedor, muy cariñoso, muy solidario y muy confiado en Dios en su manera de expresar su fe, es algo que se siente y que se palpa…“para poder y escuchar aprender de otra persona hay que saber callarse”. |
Durante este año de renovación tengo dos momentos fuertes. Los 4 primeros meses en la comunidad, 4 meses en CEFAS (Centro de Ejercicios Espirituales de Formación Apostólica y Social) y un mes otra vez en la comunidad de Colomba. Son 9 meses que yo leo como el tiempo completo de un embarazo, tiempo suficiente para la gestación de un bebe en el vientre de su mamá, con esto quiero decir que así me siento renacida, siento que ha sido una experiencia recreadora, regenerativa “es un renacer en mí”. En el momento en que sentí que ya no tenía nada ni nadie, es el momento que me di cuenta de la presencia permanente de Dios manifestada en las hermanas, presencia que me sostiene y acompaña, lo que llamo yo providencia; Él nos regala lo que necesitamos en el momento oportuno. Los continentes Africano y Latino-Americano están muy lejos uno de otro geográficamente, pero muy cercanos culturalmente. Viviendo este tiempo en esta tierra, siento que son dos continentes gemelos que no se conocen y tienen la necesidad de descubrirse mutuamente, son dos pulmones en la evangelización, en la lucha por la dignidad de la persona humana, la justicia social, ecología, armonía entre el ser humano, la creación y la naturaleza. Una y otra vez, muchas gracias a todas las personas con quien he compartido, y que han sido luz de la aurora mostrando el camino. Elise Ngombe, MMB |
NUESTRO CAMINO POR EL INSTITUTO DE LA VERA-CRUZ
“NUESTRO CAMINO POR EL INSTITUTO DE LA VERA-CRUZ” |
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Hoy nos tocó a nosotras terminar de escribir la última página del que será, tal vez, nuestro libro favorito por siempre: Nuestro camino por el Instituto de la Vera-Cruz. Hoy, tenemos que despedirnos de él y colocarlo en nuestra repisa de historias, porque sólo cerrando este, podremos escribir nuevos libros. No nos dimos cuenta de cuándo comenzamos a escribir nuestra historia, éramos muy pequeñas cuando nuestros pies cruzaron la puerta de Preescolar, llegando a un mundo totalmente desconocido para nosotras. Y desde ahí comenzamos a recibir cada día, una serie de regalos que pudimos disfrutar y adueñarnos de ellos, sin embargo, hoy nos toca compartirlos. Regalos que se desprenden de un mismo envoltorio: “El Carisma Mercedario”. Hay esencias que sellan nuestras vidas, y yo veo el Carisma Mercedario como un sello de tinta permanente que logrará dejar huella en todas las acciones que realice. A veces tendré que apretar más fuerte para que se marque, pero quedará allí. Para unas fueron 15, 13, o 5 años tal vez los que fueron afortunadas de formar parte de una familia, y de poder llamar a este espacio “casa”. No nos dábamos cuenta de que día con día fuimos formando recuerdos y anécdotas que harían que hoy, la despedida fuera extremadamente difícil. Cerrar este ciclo es hoy, para mí, una de las acciones más fuertes, significativas, nostálgicas y valiosas. ¿Cómo cerrar algo cuando tú todavía estás dentro de él? Sin embargo, creo que aquí nos han dado las herramientas para salir y brincar al mundo, porque desde siempre nos han dado una misión muy especial a cada una de nosotras, resumida, casi totalmente así: “Lograr que no se nos pase la vida nunca sin hacer algo grande por Jesús, porque en el colegio nos han educado para ser mujeres que trascienden, llevando siempre la verdad y viviendo relaciones incluyentes”. Hoy, nos toca lograr que lo aprendido dentro de este lugar traspase las paredes del Colegio: Hoy, nos llevamos lo más importante con nosotras, que es el Carisma Mercedario, el cuál logró crecer dentro de nosotras con el contacto que tuvimos con diferentes realidades a lo largo de estos años, empezando por el Servicio Social, donde se tronó un pedacito de la burbuja que nos cegaba de la realidad, mostrándonos mediante distintos casos que, cerca de nosotras hay mucha necesidad de amor, de mejora, y de felicidad.
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Por si la burbuja de la comodidad todavía no había sido tronada, entonces llegaron las misiones de Semana Santa a cambiarnos la vida a muchas de nosotras. Esta fue, sin duda alguna, una experiencia que, al menos a nivel personal, me hizo darme cuenta de todas las herramientas que nos da el Carisma Mercedario para poder asimilar las distintas realidades y, sobre todo, verlas con ojos de querer cambiarlas, de querer trabajar por ellas. Personalmente, el recorrido por el Vera me ha dejado un sentimiento permanente: El de tener un hogar. Me ha regalado a las personas más importantes de mi vida, que hoy considero familia, porque conocí amigas increíbles, sinceras, reales… conocí maestras sabias, inteligentes y pacientes, directoras y subdirectoras que se preocupaban día con día para que nuestro aprendizaje fuera real y significativo. Pude ver la alegría de las hermanas Mercedarias cada mañana, compartiéndome sus ganas de amar la vida y sonreírle a las demás personas. Y hoy puedo decir, que lo aprendido aquí no se queda sólo en mí, porque como dijo la Madre Margarita: “Hay que dar la felicidad que Dios me ha dado a manos llenas y que no todas las personas gozan. Pasar como Jesús haciendo el bien”. En este caso, mi felicidad fue todo lo aprendido en este colegio, y hoy me toca salir al mundo a compartir un poco de lo que aprendí, para que sea algo que todo el mundo pueda tener, y así, crear un mundo más justo, un mundo con más amor y en donde haya paz, pero no sólo que haya, si no que trabajemos día con día por ella. Hoy, al ser una ex-alumna del Instituto de la Vera-Cruz, me llevo el compromiso de que el Carisma Mercedario se expanda por horizontes desconocidos. Y así como hoy se cierra este libro tan bonito, significativo y lleno de aprendizajes, tengo la certeza de que siempre estará ahí para releerlo una y otra vez, y que, mejor aún, puede tener una continuación. Ana Sofía Güémez Palomar |
CREANDO UN MARAVILLOSO TEJIDO
“CREANDO UN MARAVILLOSO TEJIDO” |
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“50 años de Vida Consagrada”
Rebeca Cervantes Martín es nuestra Coordinadora del Área México-Centroamérica… y en esta ocasión tenemos la dicha de conocer un poco más acerca de su historia de vida, de la llamada de Dios a la vocación como religiosa, de su inquietud por el seguimiento de Jesús y los regalos que el transcurso de esta opción de vida le ha venido brindando. No cabe duda que poder apreciar tanta gratuidad de Dios en el tejido de su vida, no nos deja más que el deseo de compartirla y darles a conocer en esta breve entrevista, parte de lo que se le ha dado como merced en su vida. Haciendo este especial recuento por sus “Bodas de Oro como MMB” celebradas el 23 de abril en la ciudad de Guadalajara, Jalisco en México, le agradecemos a Rebeca este bello compartir y su testimonio que nos anima a vivir nuestros proyectos de vida a la luz de Jesús y su Reino. Paulina Soltero Barba, MMB “Compartiendo la entrevista” Rebeca… ¿Qué te impulsó a optar por este seguimiento de Jesús desde el Carisma Mercedario y nuestro Instituto? No hay duda que el Impulso vino de Dios. Desde niña sentí la inclinación hacia la Vida Religiosa, tuve vacilaciones al elegir con quien entrar si con las Religiosas del Sagrado Corazón RSCJ –dónde había estudiado más tiempo- o con las Mercedarias, pero pronto y claramente se hizo la luz, la atracción del Carisma Liberador y el testimoniode aquella comunidad de Chapalita en los años 60’s, que trasmitía tantas cosas a través de su entrega, su alegría contagiosa, su apertura, sobre todo de mi encargada, aunque por breve tiempo, en 1º de Secundaria Carmen Eguiagara y quien emanaba profundidad y felicidad, la lectura de “Una Virgen Apóstol”que me hacía vibrar a medida que me iba adentrando en la Vida-Misiónde la Madre Margarita, no dejaron lugar a duda. ¿Cómo le ha dado sentido a tu vida Jesús y su proyecto? Es claro que Él ha sido el centro de mi proyecto de vida, aunque ciertamente este ha ido pasando por distintas etapas y mediaciones,descubriendo diversos horizontes a lo largo del tiempo, pues no es lo mismo haber vivido la vida religiosa desde un poco, antes de las conclusiones del Concilio Vaticano II, que en el caminar de estos 50 años, y ha ido adquiriendo profundidad en lo esencial, el seguimiento de Jesús y su Reino, pero de acuerdo a los signos de los tiempos, concretizado sobre todo en la opción preferencial por las personas empobrecidas. ¿Cómo ha sido la celebración de tus Bodas de Oro, tan cerca de tu cumpleaños? Esto ha sido “coincidencia de la vida”. En Bérriz decidieron que la celebración de los votos temporales fuera el martes de Pascua, 25 de abril, que era justamente el día en que cumplía 25 años, así que ahí “se fusionaron” las “bodas de plata” de mi nacimiento con el “nacimiento como Mercedaria”, lo demás vino por lógica, al cumplir 75 años, el mismo día eran mis Bodas de Oro, que se celebraron el 23 de abril, por ser sábado. La celebración fue muy hermosa, la Eucaristía, sencilla y profunda, llena de símbolos, y ahí estaban presentes mis hermanas Mercedarias, mi familia y los 10 lugares o espacio donde, a lo largo de estos 50 años, día a día se ha ido desgranando mi existencia. Unas pancartas presentadas como ofrendas hacían presentes los distintos pueblos y realidades donde he compartido mi vida, a continuación se compartió la mesa, con una convivencia bella y muy agradable. |
Dentro de este marco celebrativo ¿Cuál ha sido tu mayor regalo hasta este momento en tu vida como Religiosa? No puedo definir uno. Siento que estos 50 años han sido algo como un “Telar” , que con su trama y urdimbre se ha ido tejiendo día a día, creando un maravilloso tejido también con sus “nuditos”: Llamada-Seguimiento-Reino, Carisma, Vida y Misión, en diversos lugares: Bérriz, Guadalajara, México DF, Ciudad Obregón, El Colli, Guatemala capital y Colomba en ese mismo país, Roma, Chiapas, el servicio por muchos años en la Conferencia de Religiosos de Guatemala, etc.el Pueblo, esas mujeres y hombres que me evangelizaron, sobre todo en Guatemala, que dieron un sentido muy especial a mi entrega misionera, que me enseñaron a orar de manera nueva, a confiar en Dios, a vivir la alegría y la esperanza en medio del sufrimiento, la pobreza, la injusticia, la persecución y la guerra, por ello en la Eucaristía ellos tuvieron una presencia muy especial y al final de ellaquise proclamar el Salmo 135 de mi vida “hoy”. El Salmo 135 es el salmo que cantaron los/as Israelitas para dar gracias a Dios por las maravillas que hizo con ellos/as.Yo como ellos/as, quiero expresar mi acción de gracias, y les pido que se unan a él… Demos gracias al Señor
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COMPARTIENDO UNA VISITA
“COMPARTIENDO UNA VISITA” |
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Una de las Misiones de nuestra Área de México-Centroamérica está ubicada en Chiapas, al sur de la República Mexicana, en la Diócesis de San Cristóbal de las Casas. Una tierra bendita, llena de cosas maravillosas y también otras tristes como ser el estado más pobre de la República, donde la violencia y la injusticia campean por todos lados, donde a causa de siglos de sufrimiento se dio el Levantamiento Zapatista el 1º de enero de 1994. En este territorio se encuentra la Diócesis de San Cristóbal las Casas, a cuyo frente, durante 40 años estuvo el Obispo Samuel Ruiz, un hombre de Dios y Profeta, quien sufrió, persecución, calumnias, amenazas y muchas cosas más de parte de las autoridades gubernamentales y tristemente también eclesiales. Le sucedieron en esta tarea los Obispos Felipe Arizmendi y Enrique Díaz, quienes han dado continuidad a los lineamientos, marcados por el Concilio Vaticano II, Medellín y Puebla, a la luz de los cuales por décadas ha trabajado esa Diócesis. Es una Diócesis viva, llena de compromisos y esperanzas, aunque también de sufrimientos y mucha pobreza del pueblo. Ahí en esa bella Diócesis en una de sus Parroquias, concretamente en Soyatitán, esta nuestra comunidad a donde llegamos en el 2001. Visitar a las hermanas y compartir su Vida-Misión, algunas de sus actividades, es ciertamente, una oxigenación y un signo de esperanza aunque el paso por esa tierra bendita sea de tan sólo una semana, pero me tocaron varias actividades como: estar en el Encuentro de las Mujeres, quienes en un caminar lento pero firme han ido haciendo un proceso de concientización, liberación y compromiso muy bonito. A la Parroquia le correspondió ser sede del Diplomado para Catequistas a nivel de Zona Pastoral, dirigido por dos excelentes personas, Martín y Silvia, personas muy bien capacitadas, dinámicas y con estupenda metodología. Durante todo el fin de semana fueron desgranando sus conocimientos llevando al grupo de Catequistas a la comprensión de contenidos, reflexiones y dinámicas de las cuales ellas y ellos mismos iban siendo creadores. |
Una reunión a nivel del Consejo Pastoral Zona, formado por 5 Parroquias. Es muy esperanzador ver a las laicas y laicos como representantes en ese espacio de reflexión, de búsqueda y compromiso. La reunión de Animadores-Consejo Pastoral Parroquial, es otro espacio vital en Soyatitán. Fue muy lindo ver cómo van realizando su trabajo de acompañamiento a las comunidades, en medio de sus dificultades laborales, de economía, etc. pero con gran entusiasmo y fe en Dios y al servicio de sus comunidades. Esta reunión además de compartir el Análisis de la Realidad local que no es nada fácil, tuvo como punto medular preparar la agenda y contenidos de la visita del Obispo a principios de junio, misma que se realiza cada 5 años. Es una ocasión en la que ellas y ellos pueden compartir los avances y dificultades de sus procesos a nivel de las distintas Áreas Pastorales: Comunidades, Catequesis, Jóvenes, Mujeres, Pastoral de la Tierra, etc. etc. y el Obispo conocerá mejor la realidad de la parroquia y es un acercamiento a este pueblo. Como decía al principio esta es una Diócesis que realmente te invita a participar, que es signo de esperanza y gratitud a Dios por su caminar. En esta semana se está realizando la Asamblea Diocesana Anual, que tiene lugar desde 1975, donde participan cientos de personas laicas, sacerdotes y religiosas/os. Durante esta semana concluirán el proceso de actualización, del Nuevo Plan Diocesano, mismo que han venido trabajando desde las bases durante largo tiempo. Sus pilares fundamentales son una Iglesia: Autóctona, Servidora, Evangelizadora, Liberadora, en comunión, bajo la guía del Espíritu. Este Plan será la “el faro” durante los próximos años en la Misión tan importante que tiene esa Diócesis donde más del 70% de la población es indígena. Rebeca Cervantes Martín, MMB |
PEREGRINAJE EN MANRESA
“ENCUENTRO CON JESÚS Y LA CASA COMÚN” |
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“Locus in quo stas, terra sancta est” (el lugar donde te encuentras es tierra sagrada (Ex. 3,5). “Al bajar del monte el rostro de Moisés resplandecía” (cf. Ex. 34, 29-35). Nos dijeron, como programa de la primera semana de “reciclaje”, que íbamos a hacer una “lectura sapiencial” de la Autobiografía de San Ignacio. Y a mí, eso de lo sapiencial me atrajo fuertemente, porque lo relacioné con parte de la Teología feminista que es muy atenta y sensible a ello. Ahora me encontraba en condiciones de profundizar el tema sin prisas. Las dos primeras semanas, durante las noches, cada una, cada uno íbamos compartiendo también nuestra propia autobiografía. Y ¿En qué consiste la “lectura sapiencial”? pues en “saber y gustar, gustar y saber”; no solo saber, sino un saber sintiente, corporal, disfrutado, saboreado, tocado, latiendo bajo la piel, pisando la tierra sagrada milenariamente, descender unos escalones de mármol para ingresar a esa onda de la interioridad, dejarse penetrar por las energías telúricas de la roca de la “Coveta”, manosear el retablo de alabastro donde está Ignacio arrodillado orando, escribiendo los Ejercicios, vuelta la cara hacia María y hacia las montañas de Montserrat. Antes de bajar los escalones, en la “ante cueva”, hay un mosaico en el suelo con un gran girasol y la inscripción: “vertitur ad solem” (se gira al sol), como una contundente invitación, como una inclinación connatural de girar hacia el centro de nuestra vida que nos unifica, que nos integra, que nos plenifica y que tiene que ver con todo el emerger de la inteligencia espiritual, de la mística del siglo XXI, pues casualmente, fue raro el maestro que no mencionó la célebre frase de Ranher: Y también está profundamente relacionado con el tema del Diálogo Interreligioso, pues quienes van incursionando en él, van visibilizando, articulando y desplegando lo más sabio, rejuvenecedor, fresco y desafiante de las ancestrales Tradiciones religiosas del mundo. Otro lugar sagrado que estremece es el llamado “Pozo de la Luz” que es donde Ignacio tuvo lo que llaman “la eximia ilustración del Cardoner”, a la que alude en el Nº 30 de su Autobiografía. Dice que, yendo de camino a hacer sus devociones a una Iglesia, se sentó a contemplar el río Cardoner y “se le empezaron a abrir los ojos del entendimiento… entendiendo y conociendo muchas cosas, tanto de cosas espirituales, como de cosas de la fe y de letras; y esto con una ilustración tan grande, que le parecían todas las cosas nuevas… recibió una grande claridad en el entendimiento…” de manera que nunca más en su vida experimentó algo semejante. A este propósito, se excavó en 2001 un pozo de 15mts. de profundidad a orillas del río Cardoner, que representa la voluntad de llegar al punto de origen de toda inspiración, el cual es coronado por un monumento sobre la superficie y al ras de la tierra, en forma de espiral de latón, en el cual están inscritos 117 nombres de personalidades de distintas épocas, que han tenido significativas experiencias místicas, incluyendo, por supuesto mujeres antes invisibilizadas. |
Mi iniciación al Cardoner fue en el año 1985, cuando pasando por la ciudad de Panamá, Carlos Cabarrús me acompañó unos Ejercicios y la parte de las habitaciones destinadas a los huéspedes se llamaba “El Cardoner”. Las notas que él utilizaba es lo que luego se convirtió en el libro: “Puestos con el Hijo”. Y ya desde entonces había indicaciones para sensibilizarse a la experiencia espiritual con el cuerpo. Esos Ejercicios me marcaron indeleblemente y ahí supe que el Cardoner era el río que va a las orillas de Manresa por donde bordeaba Ignacio. Ahora, en la Manresa real, experimento que mi cuerpo va y viene, va al pasado y disfruta más sensiblemente del presente, está más perceptible de todo don interrelacional y cosmológico y también del dolor de muchas y muchos, cercanas y lejanas, del clamor de la madre, hermana y amiga tierra. Hay momentos en que descubro que hasta cada paso que doy, voy pisando y dejándome fecundar por la tierra sagrada. Y en este marco acontecieron 10 semanas de actualización teológica con los temas del esquema acostumbrado: Acceso al Misterio de Dios, Cristología, Eclesiología: la Iglesia que Jesús quería, Eclesiologías del pueblo de Dios, Escatología-la esperanza cristiana, Diálogo Interreligioso, Claves para comprender los conflictos y retos en un mundo globalizado, Moral en tiempos de cambios profundos, y Conducidas por el Espíritu como preparación para los 8 días de Ejercicios. Ahora, luego de pasados unos días, agradeciendo también el haber logrado conformar una comunidad contemplativa, estudiantil, turística-peregrina, y celebrativa, ya que éramos 33 personas, mujeres 11 y varones 22, la mayoría de los diferentes países de América Latina y el resto de españoles que ya habían estado de misioneras/os en África; nos lanzamos el desafío de encontrar en nuestros propios contextos de origen o de misión, esa misma tierra sagrada que tanto nos nutrió, que conectó con nuestras raíces ancestrales, con la totalidad del ayer y que hoy sabiamente nos hace pisar la complejidad del presente, cuidando con ternura nuestros entornos para que no deje de emerger el resplandor de sus rostros. Beatriz Eugenia Becerra Vega, MMB |
ENCUENTRO CON JESÚS Y LA CASA COMÚN
“ENCUENTRO CON JESÚS Y LA CASA COMÚN” |
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En nuestra Misión de El Viejo en Nicaragua, hemos tenido la oportunidad de motivar al grupo de Catequistas y Jóvenes de la Pastoral del Centro Catequístico con la participación en el Retiro que anualmente preparamos como parte importante en su proceso de formación. Con el objetivo de “Fortalecer la experiencia profunda del encuentro con Jesús a la luz de los Evangelios así como, en el cuidado de la ‘Casa Común’ para ahondar y enriquecer el sentido de vida y proyecto personal”, decidimos buscar los medios necesarios para que estas chavalas y chavalos pudieran tener una experiencia que continúe iluminando su vocación a la vida y el servicio que brindan a su comunidad en las diferentes áreas que se desenvuelven. El lugar elegido fue maravilloso, una comunidad en el departamento de Estelí del municipio de San Nicolás. “La Garnacha” es una comunidad y reserva natural, ubicada a 1,400 metros sobre el nivel del mar y es parte de la reserva Tisey Estanzuela. Las y los habitantes de la comunidad de La Garnacha son quienes administran la reserva y se encargan de los toures en torno a los proyectos que realizan; ellas y ellos también trabajan con sus propias manos todos los productos que ahí se ofrecen y trabajan como cooperativa. Esta realidad nos atrajo de manera especial para que las y los jóvenes pudieran cambiar de aires y ampliar su horizonte, desde recibir el gran regalo del clima en ese aire fresco y limpio durante el día y muy frío por las noches, la acogida de la naturaleza tan diversa y diferente a la acostumbrada en El Viejo y la convivencia con ese silencio natural y propicio para el encuentro personal con la Creación que Dios nos brinda a manos llenas. La reflexión se centró en algunos encuentros que Jesús tuvo en los evangelios, como momentos clave para reconocer cómo la experiencia de encuentro con la propia realidad, posibilita una conexión profunda con el sentido de la vida, un descubrimiento de lo que el Dios de Jesús desea para cada una de sus hijas e hijos desde su historia de debilidades y virtudes. Las condiciones del lugar también dieron pie para preparar este retiro con la propuesta que hace el Papa Francisco en la Encíclica “Laudato Si”, sobre el “Cuidado de la Casa Común”. Así que, partimos con el grupo de 17 chavalas y chavalos que estaban llenas/os de emoción por conocer el lugar que fue toda una sorpresa, y por supuesto, muy entusiasmadas/os de salir de la rutina, tener la oportunidad de convivir y disfrutar de la novedad que este Retiro les suponía al estar un fin de semana dispuestas/os a dejarse encontrar por Jesús. Salimos el viernes 13 de mayo al medio día, haciendo el viaje de aproximadamente 4hrs. para llegar a nuestro destino. Llegando al lugar tuvimos la gran oportunidad de comenzar a disfrutar del recibimiento de la gente de esta comunidad, del entorno y la hermosura de contemplar el atardecer en un bellísimo mirador llamado “Apaguaji”, nombre de uno de los cerros que desde ahí se podía observar, además de las montañas del sureste del país y la cordillera volcánica del Pacífico… fue realmente un regalazo de Dios para irnos introduciendo al Retiro. Después de esta experiencia y posteriormente, cenar un rico gallo pinto con café y té de limón cosechas de esta tierra… nos dispusimos a entrar de lleno al Retiro con una puesta en común para establecer los “Acuerdos de convivencia” que posibilitaron los medios y actitudes necesarias para disfrutar de la mejor manera esta experiencia. Enseguida aprovechamos esta noche para ahondar en las expectativas que cada una/o tenía acerca del Retiro y así, liberar la energía para poder contemplar el silencio que se propuso para este encuentro, silencio que fue indispensable para dejar pasar a Jesús en su vida y comenzar haciendo un “inventario” en ella. El inventario ayudó para comenzar a dar pasos importantes a la escucha, a lo que la “Laudato Si” propone; conocer mejor lo que nuestra “Hermana-Madre Tierra” está viviendo y cómo esta realidad tiene que ver con el “sentido de vida” de cada una y cada uno de nosotras/os como seres humanos. Fue muy especial dar inicio, abriendo el horizonte a la realidad que vivimos como Creación de Dios y el amor que ha puesto en ella, en nosotras/os .Esta motivación preparó al grupo a la dinámica y oración que el día sábado fue propuesta. Así que, fuimos a descansar con el respiro profundo de ser abrazadas/os por el Dios de la Vida que anhela que ampliemos nuestra mirada ante la realidad maravillosa de nuestra Tierra y, a su vez, la realidad dolorida y sufriente en la cual estamos inmersas/os y somos parte. El día sábado fue un día muy intenso, aprovechado desde muy temprano a cada instante. Los y las chavalos ya comenzaban inquietas/os a querer ver más, conocer y disfrutar de lo atractivo del lugar, así que en medio de estos deseos, dimos paso durante todo el día a diferentes momentos de encuentro grupal, de oración personal, trabajo en equipo y sociodramas, silencios largos y profundos, de contemplación y reflexión a la luz del encuentro de Jesús con: “La mujer hemorroísa”, “El ciego Bartimeo”, “El joven rico”, “Zaqueo el recaudador” y, “El Padre Misericordioso”. |
Estos tiempos de oración y reflexión, se complementaron de manera especial en espacios específicos del día con la reflexión de los radiales de REPAM (Red Eclesial Panamazónica) sobre: “La Hermana Agua”, “El Hermano Coltán”, “Las Hermanas y Hermanos” y “Cambiar de rumbo”, que dieron pie a las chavalas y los chavalos a preguntarse qué es lo que más les resuena de la realidad, ante la falta de cuidado de los recursos naturales, el impacto que estamos causando al medio ambiente, la violencia y falta de respeto a la dignidad y derechos como personas, sobre todo a las más empobrecidas y necesitadas frente a la “cultura del descarte”… una serie de temas que sobrecogen a nuestro mundo y que en el presente son determinantes para revertir en actitudes y acciones concretas, lo que causaría un deterioro irremediable para el planeta, para la creación y con ello, para la humanidad. Cada momento de oración fue recogido de manera especial haciendo puestas en común, compartiendo de manera libre en el grupo, aquello que del texto bíblico y las reflexiones proporcionadas para la oración, les llamó más la atención, lo que más les impactó de la actitud de cada personaje que se encontró con Jesús o alguna invitación que hayan sentido para su vida, a partir de estas experiencias sanadoras, de fe profunda, de acogida a la debilidad personal, de esas experiencia de donación del amor de Dios que ama misericordiosamente y que revela en Jesús un amor infinito así como somos, con nuestras historias de dolor y gozo. Así, las y los chavalos fueron tocando hondo su historia personal, las actitudes y acciones que les van posibilitando un encuentro más íntimo con Dios al reconocer sus deseos más profundos, sus motivaciones, las dificultades y limitantes que tienen en su vida diaria, que les impiden seguir libremente a Jesús en lo que cotidianamente viven. Fueron identificando llamadas concretas al cambio personal y comunitario, desde el cuidado personal, la importancia de ser coherentes y honestas/os consigo mismas/os y con las demás personas para propiciar una experiencia de verdadera apertura al amor de Dios en lo que sienten y hacen. Parte importante fue celebrar la Eucaristía acompañadas/os por el Padre Patricio quien es parte de la Congregación de los Hermanitos de Jesús y coordina la pastoral de esta comunidad. Muy amable y cercano a todas/os, nos motivó a celebrar en vísperas, la gran fiesta de Pentecostés que abrazaba toda esta experiencia de iluminación y gozo en la habitación del Espíritu que impregnó toda la convivencia grupal. Después de la Eucaristía y la cena, se vivió otro momento especial de contemplación haciendo una caminata en silencio por el calle principal de la Comunidad, que con un cielo estrellado nos condujo a encontrarnos con el silencio hondo de la noche para así, poder disfrutar y admirar la maravilla de la creación entorno nuestro y en nosotras/os mismas/os. Caminando de regreso a la capilla, siempre invitando al grupo procurar mantenerse en sí mismas/os, se les invitó a recordar los dones del Espíritu Santo de los que se habló en la misa y así, se les motivó a las y los jóvenes a recoger el día haciéndose las preguntas… ¿Quién es Jesús para mí? y ¿Cómo me invita el Espíritu Santo a ser don? Las y los chavalos fueron recogiendo sus experiencias, cerrando el día con el compartir grupal, impregnadas/os de las sensaciones e invitaciones vividas durante estos días. Pudimos conocer lo que ha llevado a la comunidad de “La Garnacha” a hacer un caminar en conjunto, solidario, de esfuerzo común que les ha traído grandes beneficios y una vida comunitaria sostenible, en base a los proyectos que han impulsado desde el cooperativismo. Un miembro de la comunidad y de la cooperativa, nos introdujo a lo que fue un recorrido por parte de la comunidad para conocer lo que ha supuesto todo este trabajo comunitario, nos habló de la historia del cooperativismo que han vivido, donde todas las personas son dueñas de la tierra, la cuidan y la trabajan de una manera respetuosa, de forma que todas vivan de manera digna y armoniosa. Las chavalas y los chavalos prestando mucha atención a toda esta experiencia se llenaron de alegría al hacer esta visita por los campos de cultivo, el bosque, los senderos, los paisajes, la granja de cabras, los semilleros medicinales y la granja de lombrices, conociendo en vivo y en directo todo aquello que ha sumado gran parte de la experiencia del cuidado de la “Casa Común” y de “Cambio de rumbo” que esta comunidad se ha propuesto realizar. Esta experiencia fue el culmen de este Retiro de encuentro y oración con el Dios de la Vida que en las y los chavalo se manifestó en el deseo por cuidar más de sí mismas/os, de su entorno, sus relaciones y de su ciudad, desde la experiencia honda con Jesús ante el respeto a la Vida. Así, llenas/os de novedades, propuestas, invitaciones y llamadas por el bien común, recogidas en la evaluación del Retiro y en el compartir de la oración final, regresamos a El Viejo después del almuerzo, deseando poner en práctica los aprendizajes que esta oportunidad nos ha regalado a quienes participamos de esta maravillosa experiencia. Paulina Soltero Barba, MMB |
CONVOCACIÓN DESDE LA MISERICORDIA
“CONVOCACIÓN DESDE LA MISERICORDIA” |
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En nuestra misión de El Viejo, en Nicaragua, tenemos la suerte de vivir junto a la Basílica de Nuestra Señora de la Concepción, Patrona de Nicaragua, conocida como la “Virgen del Trono” y este año declarado por el Papa Francisco como el Año de la Misericordia, se le ha concedido el privilegio de tener la Puerta Santa, por donde al atravesarla, se puede ganar una indulgencia especial concedida por el Papa. Con ese motivo, este año el día 1 de mayo, la CONFER (Conferencia de Religiosas/os) de nuestra Diócesis, organizó una visita a la Basílica de El Viejo, como peregrinación de las religiosas y religiosos de nuestra Diócesis, para visitar a la Virgen en este mes de mayo, ganar la indulgencia y tener un día de convivencia como Vida Religiosa. |
Participamos 12 Congregaciones. Hicimos el paseo de peregrinación, donde era bonito ver los rostros de la gente que nos veía pasar, pues es la primera vez que se ve en El Viejo una peregrinación de religiosas y religiosos. Después de hacer el recorrido desde el templo del Calvario a la Basílica entramos por la Puerta Santa, participamos en la Eucaristía y después todas y todos vinimos a nuestra casa, el Centro Catequístico, para almorzar. Nuestro salón estuvo alegre, con la presencia de tantas hermanas y hermanos. Fue un día muy especial, en el que nos pudimos encontrarnos, orar, convivir y animarnos a continuar en la búsqueda de ser cada vez más fieles a la misión de seguir y anunciar a Jesús, respondiendo cada quien desde nuestro Carisma a los retos que nos presenta la evangelización en el mundo de hoy. Abdonda N. Viar Bilbao, MMB
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PRESENCIA MISIONERA SIEMPRE AL SERVICIO
“PRESENCIA MISIONERA SIEMPRE AL SERVICIO” |
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El pasado 23 de mayo, la Comunidad Hermana Vicky de Colomba en Guatemala, ha realizado una celebración especial para despedir a la Hna. Nora, MMB. Doña Yoli de Gutiérrez, responsable de la comunidad Hna. Vicky, organizó junto con Rocío y Don Otto quienes son Catequistas de la comunidad, este reconocimiento por la presencia misionera de Nora en su caminar como comunidad. Tuvimos varias actividades como la oración realizada por Doña Yoli, Rocío dirigió los concursos, que fueron de “modelaje” allí participó la misma Nora quien ganó el premio. Yo, como voluntaria en el concurso, no sabía que me iban a pedir, pero fue fácil, me dijeron que imitara a Nora en lo que más hacia en Comunidad, la imite en el manejo del vehículo, porque siempre está al servicio de lo que se necesita y removiendo las cazuelas, porque le gusta cocinar y lo hace muy sabroso. |
Hubo cantos de la comunidad, las palabras de agradecimiento fueron muy emotivas. Llegaban al corazón los testimonios de cómo Nora les ha ayudado a consolidar su fe. Recordaron también a Vicky, porque ella participaba en la comunidad al menos una vez a la semana aunque ya estaba bastante enferma. Don Israel Barillas ofreció un gran testimonio, diciendo que gracias a Vicky el seguía en su compromiso cristiano. Al finalizar este compartir, nos ofrecieron el consabido tamalito con café y le regalaron a Nora un enorme pastel. Fue una bella velada, donde participamos todas las Hermanas de la Comunidad MMB. María Micaela Reynoso, MMB |